Las perspectivas sugieren que la economía crecerá entre 2 y 3 por ciento, pero las proyecciones sobre la inversión privada menos optimistas. A finales de 2022, el Banco Central de Reserva estimó que la inversión privada crecería 1 por ciento.
Sin embargo, un estudio reciente del Instituto Peruano de Economía señala que la inversión privada podría caería 2.8 por ciento al finalizar 2023.
Según el reporte, las proyecciones toman en cuenta el actual escenario política y de una posible Asamblea Constituyente y los efectos que tendría sobre la economía las protestas sociales.
El deterioro económico internacional mantendría expectativas negativas durante 2023. Con la inversión privada retrocediendo entre 15 y 16 por ciento. En general, la caída en la inversión privada evitaría la generación de 20 mil puestos de trabajo formales, la cifra representa un quinto del empleo generado en promedio en los últimos cuatro años previos a la pandemia.