El presidente Pedro Castillo decretó el estado de emergencia para la capital del país este martes, una medida que impide a las personas salir de sus hogares y transitar, excepto si trabajan en servicios esenciales.
El transporte no trabajo este martes, a excepción de única línea de Metro existente, mientras miles de personas caminaron por las calles intentando volver a sus hogares. El presidente tomó la decisión en medio fuertes protestas de transportistas y agricultores por los elevados precios.
Mientras la Defensoría del Pueblo calificó la decisión de Castillo como inconstitucional por la ausencia motivos claros, además de ser desproporcionada.
El decreto supremo fue publicado a la medianoche del lunes un documento reservado para la policía, donde se recomendaba la prórroga del estado de emergencia en Lima y Callao, debido al paro indefinido de transportistas.
Las protestas iniciaron el 28 de marzo por el aumento en el precio del combustible y se ha extendido a otras áreas gremiales, generando algunos episodios de violencia y disturbios.
La inestabilidad que vive el país se ve reflejada en los cinco presidentes que tuvieron el máximo cargo en los últimos seis años, las protestas, perdida de vidas y materiales ocasionados por la pandemia, afectó profundamente a América Latina.
La medida tomada por Castillo es un giro radical para el cuestionado y acostumbrado a cambiar de opinión. Las críticas señalan los constantes cambios de criterio como prueba de su incapacidad para seguir dirigiendo al Perú.
