Rusia elevó sus exportaciones de diésel hacia América Latina, con especial énfasis hacia Brasil tras ser sancionado sus envíos a Europa. Moscú fue durante mucho tiempo el principal proveedor de esta materia prima hacia Europa.
Las refinerías en América Latino no producen suficiente combustible para la demanda interna de vehículos que funcionan con diésel. El embargo a los productos petroleros rusos están siendo que las exportaciones de diésel se realicen hacia África, Asia, Oriente Medio y América Latina.
En marzo, Rusia envió más de 580.000 toneladas a Latinoamérica, con 440.000 toneladas llegando a Brasil, mientras que 140.000 toneladas terminaron en Panamá, Uruguay y Cuba.
Los suministros de diésel desde Rusia a Brasil se incrementaron a 663.000 toneladas entre enero y marzo de este año, un fuerte incrementó al ser comparado con las 74.000 toneladas enviadas durante todo 2022.