Sony recortó sus metas de ganancias luego de un primer trimestre lento para su negocio de PlayStation, que atribuyó a la caída del interés de los consumidores por la falta de juegos nuevos y reducción de restricciones por el COVID-19 que hicieron salir de casa a muchas personas.
La empresa detalló que obtendría apoyo con la próxima lista de videojuegos y tendría planeado como aborda los problemas de suministro que interrumpen la producción del PlayStation 5.
Las ganancias en la unidad de videojuegos es clave debido que retrocedieron 37% en el trimestre entre abril y junio en comparación con 2021.
Sony recortó las metas de ganancias anuales en la unidad de videojuegos en 16%, señalando una caída esperada en sus ventas, mientras registra gastos de cierre antes de lo esperado.
Sony vendió 2,4 millones de PS5 durante el primer trimestre, con un ligero aumento respecto al mismo período del 2021.